Vie 31 Mar 2006
El género cinematográfico que define el concepto Buddy Movie es aquél en el que los protagonistas son una pareja de amigos, generalmente del mismo sexo. Más conocido, y que habitualmente se asocia erróneamente de forma exclusiva a este género, es el subgénero que engloba las pelis de policías coleguillas que se hartan de meter tiros y matar a los malos a base de chascarrillos varios. Por lo general, si te hablan de una buddy movie, a uno le viene a la cabeza títulos como Límite 48 horas (1982), film que además es considerado como el iniciador de este subgénero policiaco, Superdetective en Hollywood (1984), Arma Letal (1987), Tango y Cash (1989), Starsky & Hutch (2004) y un largo etcétera.
Pues nada, después de éxito cosechado por la desternillante Shaun of the Dead, aquí penosamente titulada Zombies Party, nunca me cansaré de repetirlo, Edgard Wright, Simon Pegg y Nick Frost vuelven a la carga con lo que parece ser una buddy cop movie titulada Hot Fuzz (2007). La cosa promete bastante teniendo en cuenta lo casposillos y cachondos que pueden llegar a resultar Simon Pegg y Nick Frost. La película dispone de una especie de videoblog colgado en la web de la productora Working Title Films, por ahora han aparecido un par de vídeos, en el primero podemos ver a Simon Pegg contando como está siendo su preparación al tiempo que pega tiros como un descosido, se pega con otros haciendo llaves y hace el melón en una bici. El segundo todavía no lo he visto…
El argumento del film es el siguiente, sacado de la web de la productora: El agente Nicholas Angel (Simon Pegg) es muy bueno en su trabajo, de hecho es el mejor y hace perecer al resto de sus compañeros unos muñones de muy señor mío. A raíz de esta superlativa eficiencia, sus jefes deciden sacarlo de circulación y lo mandan a Sandford, un pueblucho perdido en el oeste de Inglaterra. Rodeado de fiestecillas campestres y de mucho encuentro vecinal alrededor de una barbacoa, el agente Angel intenta adaptarse a su nuevo entorno acompañado por su nuevo compañero Danny Butterman (Nick Frost), un poli muy obtuso y falto de entendederas. Cuando todo parece perdido para la vida profesional del policía, una serie de macabros accidentes vuelven a motivarle. Acompañado por su nuevo compañero de faena Butterman, Nicholas Angel intentará demostrar que Sandford no es lo que parece…
La cosa promete mucho frikismo policiaco y seguro que más de un acto extremo a modo flipadillo.
Nota: Ayer fui al teatro después del curro y no me dió tiempo a publicar este post… la obra: El Cartero de Neruda (Ardiente Paciencia) de Antonio Skármeta, dirigida por José Sámano y con Miguel Ángel Muñoz, José Ángel Egido, Tina Sainz, Marina San José, Juan Manuel Gómez y Pablo Castañón. Muy recomendable.