Mar 13 Mar 2018
Pues ayer día 12 de marzo se estrenó en medio mundo Aniquilación (Annihilation) de Alex Garland, producción Paramount / Skydance que debido a la perpleja recepción de los asistentes a los pases de prueba, y decisiones de los mogules de ambos estudios (Scott Rudin por un lado y David Ellison por el otro), se ganó el derecho a no tener distribución fuera de los EEUU hasta que Netflix decidió hacerse cargo de ella. Se ve que Aniquilación era en parte lo que buscaban ambos estudios, pero no completamente lo que esperaban ofrecer a los espectadores. El film adapta la primera obra de la trilogía Jeff VanderMeer, "Southern Reach", titulada "Aniquilación", y tras esta deberían llegar, que no lo harán, sendas adaptaciones de las dos obras que completan esta compleja historia sobre la cambiante identidad humana, "Authority" y "Acceptance".
Con un reparto francamente eficiente encabezado por Natalie Portman, Jennifer Jason Leigh, Gina Rodriguez, Tessa Thompson, Tuva Novotny y Oscar Isaac (fin), nos encontramos ante un film donde se nos propone el viaje expedicionario de un grupo de mujeres hacia un entorno agresivo conocido como el "Área X" donde todo lo que entra no sale (con vida), salvo el marido de la primera de ellas y razón suficiente para que su personaje decida dar un paso adelante tratando de comprender qué le ha cambiado. La verdad es que uno no sabe qué hay dentro de ese lugar salvo cuando allí se aventura, pero llegado el momento Garland / VanderMeer ponen sobre la mesa las consecuencias que provocan que la cabeza del espectador comience a dar vueltas tratando de comprender lo que está viendo. A modo ecosistema inconcebible, dentro de ese "Área X" uno pierde la consciencia del paso del tiempo y lo que es más alarmante, de la propia identidad, de igual forma que hace frente a un mundo selvático donde la evolución (o mutación) avanza a velocidades grotescamente inconcebibles. Vamos, lo que sufren las protagonistas lo experimentan en sensaciones el espectador.
Probablemente el gran problema de la película es lo profundo y trascendental que pretende contar. Garland hace méritos para resultar asequible pero, de forma innegable, el resultado no es plato de buen gusto para todos por igual. El film además, y supongo que en previsión de que no habrá secuelas, trata de dar sentido a un final que siendo más tremendo (como la novela) nos dejaría relativamente en tierra de nadie. Aniquilación es un film de acontecimientos inexplicables, de cambio del ser, de la pérdida de identidad, de viaje a un infierno del que, si me apuras, no tienes escapatoria. Es a su vez una película de terror (si bien no acaba de cuajar como tal), bien por lo que se le oculta a la persona el hecho de entrar en el "Área X", como por lo que te vas a encontrar ahí… hay dos momentos susto de mírame y no me toques, uno de impacto y el otro de puro pavor. Pero insisto, al igual que ese viejo clásico en blanco y negro que cuenta con un buen puñado de remakes a sus espaldas, Aniquilación basa su miedo en el darte cuenta que tú no eres tu tan pronto entras en esa zona donde no hay ley lógica que rija su evolución.
Por otro lado Aniquilación es un incansable caleidoscopio de color (aturde), y de ritmo sosegado (por momentos muy cansino), que hace mella en el espectador de la misma forma que las protagonista se desmoralizan conforme se adentran más y más en ese "Área X". Garland parece querer que lo pases tan mal como las cinco aventureras. Además, en algún momento la película supura elementos presentes en "El corazón de las tinieblas", la novela de Conrad, no tanto por lo que cuenta si no por las chocantes y enfermizas experiencias de las protagonistas al entrar más y más en ese mundo desmoralizante. Y ojo, porque para rizar el rizo, el hecho de estar todo narrado por el personaje de la Portman, hace todavía más intrigante ciertos momentos de extraña repetición (esa casa por ejemplo), elevados más aun gracias al final que se nos plantea…
Cartel final de Annihilation de Alex Garland