Sáb 1 Jul 2023
Venga, ya con junio terminado, y como hace ya un tiempo que no publico nada pues decido ponerme al día con las cosas que me han llamado la atención a lo largo del mes de mayo… que no fue poco.
Scream VI de Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillett. Tan sencillo como decir "otra más de la saga", pero sangrienta a más no poder. Más asesinatos no exentos de brutalidad, muchos cubos de espeso líquido rojo, serial killers de rigor y algunos giros en la trama que tristemente juegan en contra de la poca credibilidad de la película. Ojo, está bien, entretiene, pero al final hay que esperar lo totalmente inesperado y asumirlo.
Guardianes de la Galaxia vol. 3 (Guardians of the Galaxy Vol. 3) de James Gunn es la mejor película de la actual etapa del MCU, que por otro lado no es decir mucho y aun cuando gana al resto por abrumadora goleada. Es desgarradora, divertida, llena de detalles maravillosos y el mejor villano episódico en mucho tiempo. Gunn quizás se pasa a la hora de mostrar emociones, pero la película merece estos momentos por lo que parece es el punto final para el grupo original. Música bien seleccionada, tenemos una tercera banda sonora perfecta para escuchar en bucle, y como siempre gran grupo de personajes que, de alguna manera, echaremos de menos seguro. Recordad que hay dos secuencias post-créditos… ambas divertidas y entrañables. Merece ser vista en el cine, y más ahora que cada día se muere más.
Cartel de Guardianes de la Galaxia vol. 3
Operacion Fortune: El gran engaño (Operation Fortune: Ruse de Guerre) de Guy Ritchie. Película poco común de Guy Ritchie: menos cómica, más seria y por momentos bastante aburrida (algo realmente extraño en sus películas). El tercer acto es sin duda lo mejor, un actioner bien elaborado con un giro inesperado, pero el resto de la película, realmente anodina, y más centrada en distraernos que otra cosa. Es complicado seguir la extraña trama incluso con buenos actores como Statham, Plaza o Grant. Está bien… pero no lo suficiente. La tenéis en Prime Video.
Air de Ben Affleck. Ese ya clásico tipo de película que se puede disfrutar sin pedir nada realmente apabullante. Un pedacito de la historia centrada en cómo se gestó uno de los contratos más lucrativos jamás firmado. Entretenida, sin más. También en Prime Video.
Oso vicioso (Cocaine Bear) de Elizabeth Banks. Inesperada, muy sangrienta, bastante divertida, aunque por momentos un pelín tocada por el tedio, y cargada de humor negro bastante cafre. Así que lo que tenemos entre manos es una muy buena comedia repleta de meloso rojo sobre unos hechos reales exacerbados hasta niveles dignos del mejor colocón. De regalo un buen reparto con rostros como los de Keri Russell, Alden Ehrenreich, Ray Liotta (fallecido poco después del rodaje) o Margo Martindale, y un oso come-hombres que se lo pasa teta.
Cartel molón de la inesperada / esperada Pearl
Pearl de Ti West. Cómo la locura mental puede hacer florecer un personaje muy peligroso encarnado por una angelical Mia Goth (diosa). Lo que empieza como una historia ingenua que podría llevarnos por un fantasioso camino de baldosas amarillas, se acaba convirtiendo en el nacimiento de una Pearl que nada en la inseguridad y en el descontrol. La elegante presentación, en la línea de aquellos clásicos como ¿Qué fue de Baby Jane?, nos traslada a un entorno extraño y decadente, donde cuando buscas hacer realidad un sueño, son tus propios límites y demonios los que te impiden hacer cosas que no te plantearías para conseguirlo… pero claro, a Pearl se la trae al pairo todo esto. El nacimiento de una nueva estrella de los asesinos en serie. Estrenada hace poco en Movistar, en Blu-ray este junio, pero curiosamente con el film donde nació el personaje, X, en un cajón olvidad de cara a ser llevada a formato Home cinema.
Barbacoa (Barbaque) de Fabrice Eboué. Estrenada en el Festival de Sitges el año pasado, estamos ante una de esas truculentas, asquerosas y bastante divertidas películas. Recomendable no verla mientras se come o cena. Historia protagonizada por Marina Foïs, la magistral actriz de As Bestas, cuenta la historia de esta, su marido carnicero, los veganos y el jamón cocido llegado de no sé qué cerdo inexistente. De traca de maraca. Me recordó a alguna otra película, si bien esta resulta bastante macabramente fresca… en el amplio espectro de las palabras. La tenéis en Filmin.
Hasta los huesos (Bones and All) de Luca Guadagnino. Historia de amor hasta lo más profundo de las entrañas, literalmente. Fantásticas interpretaciones de Timothée Chalamet, Taylor Russell y el desesperante Mark Rylance, asquerosa a más no poder, pero diferente de principio a fin. Un coming-of-age en un mundo demasiado desagradable con más gente como los protagonistas de los esperados. Merece la pena verla. También en Prime Video.
Cartel de la fantástica Tetris
Tetris de Jon S. Baird podría quedarse en eso de ser otra película basada en hechos reales, pero es sin embargo una película audaz, lúcida, superior y realmente entretenida. En lugar de contarnos la historia de cómo se creó el juego, disfrutamos viendo todos los giros que dio la historia en cuanto a los derechos sobre la famosa propiedad. Necesaria, sin duda, y con un Taron Egerton que lo pasa mal en una época de transición total para la ex-Unión Soviética. Una barbaridad que se puede ver en Apple TV. Ojito que es producción de MARV… la compañía del siempre glorioso Matthew Vaughn.
Sisu de Jalmari Helander (doble campeón de Sitges en 2010 con Rare Exports y 2022 con esta película). Con la Segunda Guerra Mundial tocando a su fin, un grupo de nazis se topa con el Rambo finlandés (Jorma Tommila). Este último hombre en pie, que se ha hecho con una generosa cantidad de oro, iniciará una sangrienta embestida bélica contra estos nazis, matando a todos de diversas formas violentas y truculentas (incluso lanzando una mina a la cabeza de un pobre soldado). Helander dirige la película de forma correcta, pero incluso pese a durar 91 minutos de metraje, por momentos parece que estamos ante una obra de dos horas en la que el señor Morfeo viene a darte las buenas noches. Pero si, hay que verla, hay que disfrutarla y hay que tomársela con paciencia. Sólo sea por el glorioso y extremo body count que atesora el Rambo finlandés este.