Sáb 1 Feb 2025
Arranco este 2025 a buen ritmo y, un día después del 31 de enero, os dejo con la merecida entrada de revisión del mes. Por lo general cine de altas esferas, genialidades como The Brutalist, Parpadea dos veces o Kind of Kindness, espacio para el recuerdo con Martyrs, y no recomendaciones como el golpe bajo que ha sido Hombre Lobo. Os invito a la lectura.
The Brutalist de Brady Corbet. Es The Brutalist una película desafiante, triste y dramática, pero igualmente atractiva. Es The Brutalist dura, moralmente depravada, pero igualmente reveladora. Es The Brutalist como el trabajo de su protagonista, robusta, asfixiante y fría. Es el film Brady Corbet una demostración de cine clásico a lo bruto, obra eterna con su obertura, una vida de principio a fin, y su epílogo. Es tan particular su de punto de vista (narrativa, personajes, fotografía, sensibilidad…) que la convierte en un film de autor como ya hicieran otros de la talla de David Lean o Stanley Kubrick. Es The Brutalist una película que debe verse en cines, porque es donde realmente se disfruta de la verdadera esencia de este cine.
Uno de los carteles de The Brutalist
Parpadea dos veces (Blink Twice) de Zoë Kravitz. Pues una de las buenas, cine de crudeza, salvajismo y venganza. Parpadea dos veces es un rape and revenge inteligente, no oculta nada y con sus saltos de fe te deja con el culo torcido dada la aberrante peripecia de su protagonista. Recuerda de alguna forma a los desenfrenos de films como Very Bad Things, donde la espiral de caos (en este caso depravación) crece sin control hasta la explosión final. Menudo debut el de Zoë Kravitz, frescura con mucho poso reivindicativo, pero que aquí no atraganta ni aturulla, sencillamente funciona a la perfección de principio a casi fin… Parpadea dos veces tenéis en Prime Video.
Kind of Kindness de Yorgos Lanthimos. Pendiente del año pasado me paso por le grotesco universo de Kind of Kindness, un compendio de rareza superlativa. Abonado a su reparto más fetiche (Emma Stone, Jesse Plemons y Willem Dafoe), Lanthimos nos cuenta a lo largo de cerca de tres horas otras tantas historias protagonizadas siempre por el mismo reparto, y donde hay tiempo para el canibalismo, diversas parafilias, el intercambio de parejas, los universos alternativos y otras variopintas locuras. La verdad, no veo a nadie más capaz de realizar esto. Kind of Kindness un nuevo viaje lisérgico producido por la farmacéutica Lanthimos, una rara mezcla de terror, comedia negra, y otras mierdas. Kind of Kindness puede ver se en Disney +.
Heretic de Scott Beck y Bryan Woods. El primer film de terror del año es una de terror psicológico, y lo que es una montaña rusa que a cada giro te deja el culo más torcido, acaba metiendo el freno de mano para resolverse de forma anodina, genérica y apoyada en deus ex machina de tres pares. No es decepcionante, Hugh Grant está maravilloso, la opresiva atmósfera es incómoda, el juego que se trae entre manos es perverso, las coprotagonistas están igualmente geniales. Vamos, todo funciona como un reloj suizo pero al final le falta un punto… puede que más esperado por los locos del género, y que obviamente difiere de la visión de los directores / guionistas.
Kill de Nikhil Nagesh Bhat. En la india también hacen cine de acción a lo bruto. El film de Nikhil Nagesh Bhat es un producto infrecuente que bebe del noble arte y estilo de cineastas como Gareth Evans o Timo Tjahjanto. 45 minutos de sufrimiento y un posterior desparrame hiperviolento donde el despiporre no tiene descanso. Este tren del terror se convierte en un escaparate para un body count que no deja de crecer y donde las más variopintas muertes se suceden. No imaginaba este nivel en el cine indio… muy top.
Hombre Lobo (Wolf Man) de Leigh Whannell. Soporífera como pocas. Nunca el mito del hombre lobo se ha quedado en tan poco. Me sorprende la oportunidad perdida por Whannell tras llenarnos el pecho con las dos muy notables (o casi sobresalientes) Upgrade y El hombre invisible. Esta vez salvo la idea narrativa temporal Jo, ¡qué noche! o Todo en un día, que aporta un dinamismo que al menos otorga originalidad al film, la cosa se queda en el triste devenir de un taciturno y frustrado escritor, que decide convencer a su mujer para teletrabajar desde el culo del mundo al tiempo que se apena por no haber hablado con su fallecido padre durante casi 20 años… ¡a pastar! Los FX muy bien, pero deslucen en el conjunto.
Os dejo ahora con un par de recomendaciones de diferente grado. Uno de los debuts en el conocido como nuevo extremismo francés, y otra que pegó fuerte en su día a la sobra de medio ciento de clásicos de los que todos nos acordamos.
Martyrs de Pascal Laugier. Primera vez que me adentro en el grotesco viaje de Laugier, uno de los miembros del definido como nuevo extremismo francés. Laugier moldea toda la brutal violencia que supura el film en base a la variopinta y metafísica búsqueda del más allá. Muy macabra toda ella, me generan dudas ciertos pasajes oníricos, donde cuesta discernir si puedes tocar la carne o simplemente imaginártela. Es extrañamente interesante, y todo gracias a que lo que propone interesa. Martyrs tenéis disponible en Filmin.
Leviathan de George Pan Cosmatos. Si la hubiera visto en 1989 como otras, seguramente la hubiera valorado de forma diferente. Con un reparto francamente molón donde figuran rostros conocidos como los de Peter Weller, Richard Crenna, Daniel Stern, Ernie Hudson, Hector Elizondo y Meg Foster, George Pan Cosmatos se saca de la manga un rip off en toda regla de Alien, La Cosa, Abyss y tantas otras. Efectos pobres o muy pobres, una monstruosidad copia y pega de La Cosa, y unas situaciones de risa. Uno piensa en Juan Piquer Simón y su La Grieta, y… señores, se come los huevos Cosmatos con nuestro genial director. Tiene su gracia.
Nos vemos.