Conocí a Alberto Hortas hace unos años, el mundo está lleno de casualidades y esta fue una de ellas. Este oriundo de Santiago de Compostela, nacido en 1980, desde muy joven enloqueció por los efectos especiales de maestros como Dick Smith o Rick Baker. La casualidad hizo que se encontrara con la posibilidad de hacer un curso de maquillaje con Ricardo Spencer, Spencer SFX, para luego estudiar en Mestre Mateo una especialidad de escultura y posteriormente aventurarse con éxito en la carrera de Bellas Artes en la universidad de Pontevedra. Durante su tiempo de estudio sus inquietudes le llevaron a Madrid a unas conferencias impartidas por Colin Arthur, responsable de efectos de films como Abre los ojos (1997), La historia interminable (1984) o Furia de titanes (1981), y luego las ganas de aprender se vieron recompensadas con unas prácticas con Reyes Abades participando en El Espinazo del Diablo (2001), film en el que entró en contacto con la gente de DDT Efectos Especiales. Bueno, después de esta breve reseña biográfica toca comenzar las preguntas de rigor típicas de una entrevista de esta guisa.
Uruloki: Antes de ponerme a fondo con el tema central de la entrevista, que no es más que preguntar por cosas del El laberinto del fauno (2006), digámoslo así, ¿Cuándo te dio la venada del mundillo de los efectos especiales?
Alberto Hortas: Para contestar a esta pregunta tengo que remontarme a hace muchos años. Aunque suene a topicazo, a mi madre siempre le gustó el tema de los disfraces de carnavales y digamos que, de alguna manera, tuve innato el gusto por este tipo de cosas, cómo poder auto construirse los trajes, diseñarlos de manera casera y con bueno resultados. De casualidad, un día mi madre vio un anuncio en el periódico donde se avisaba que se estaba impartiendo un curso de efectos especiales en la Sala Nasa que daba Ricardo Spencer… en la foto salía Ricardo con el brazo derecho ardiendo y eso me flipó. Lo primero que imaginé fue "un técnico de efectos especiales aquí en Santiago, este tiene que venir de Hollywood o de América", ese mismo día en el recreo me acerco allí y me encuentro con Ricardo comentado cosas de látex, moldes, azúcar para hacer botellas de caramelo, impactos de bala, etc. Al día siguiente tuve un examen, lo hice, falté al resto de clases y así entré en contacto con Ricardo para hacer otro curso en Cangas durante un mes todos los fines de semana con un antiguo compañero de instituto. Ese fue mi loco inicio.
U: ¿Como definirías el estado actual del entorno profesional de los efectos especiales en España?
AH: A nivel laboral hay curro, lo que pasa es que es bastante inestable porque te suelen contratar por proyectos. Sueles estar tres o cuatro meses, poco más, currando a tope hasta doce horas diarias y generalmente como freelance, luego se termina y en un principio no hay continuidad. No ganas lo suficiente como para poder parar y estar viviendo de las rentas otro tanto, ya que el trabajo, que es muy específico y técnico, no es tan profesional como el que hay fuera de España, donde si deben ganar bien. A lo mejor tampoco trabajamos al mismo nivel que en el extranjero, pero creo que puede haber algo intermedio.
U: Ahora toca hablar de El laberinto del fauno. Primero de todo ¿Cómo llega uno a trabajar en una producción de este nivel?
AH: Pues estaba en la escuela de arte Mestre Mateo, y al final del curso, 1998 o 1999, había que hacer unas prácticas voluntarias. Me fui una semanita a Madrid intentando encontrar una empresa que me aceptara para hacer las prácticas, visité Reyes Abades, Colin Arthur y RHK. En un principio ninguna me dijo que si y a la vuelta en Santiago volví a llamar para probar de nuevo suerte… esta vez el primero que me contestó fue Reyes Abades que me dijo que si. Así que dicho y hecho, me voy a Madrid y me encuentro trabajando para Reyes Abades en El espinazo del diablo!, allí conozco a David Martí y a Montse Ribé de DDT, y a Juan Serrano, un crack de este mundillo, que estaba en Reyes Abades, también descubro resquicios de una joven promesa que había pasado por el taller, un tal Arturo Balseiro. Luego las cosas fueron poco a poco, Serrano se fue a DDT, yo seguí en contacto con el por internet y teléfono aunque le hice alguna visitilla obligada también a Barcelona y, como no, visitando DDT. Y así durante cinco años, donde paralelamente vuelvo a trabajar varias veces con Reyes Abades. Todo igual hasta que un día me entero que se podía venir a rodar a Galicia El laberinto del fauno (2006), acto seguido me pongo en contacto con David y Montse de DDT para decirles que si vienen que cuenten conmigo que trabajo gratis, lo que sea! Para mi sorpresa me comentan que han estando viendo un CD con fotografías de mi trabajo, etc., y nada, me llaman al cabo de unos días para ver si quiero incorporarme al proyecto!
U: Estuviste trabajando para David Martí, Montse Ribé y la gente de DDT como freelance, ¿no? ¿Cómo ha sido trabajar con una compañía que ha crecido tanto en importancia internacional en los últimos años?
AH: Ha sido cumplir un sueño. Luego en el día a día el ritmo cambia y te das cuenta que es diferente a como te lo planteas de inicio. La experiencia a nivel profesional ha sido tremendamente positiva, durante casi siete meses he currado a saco y conocido gente majísima además de aprender cosas increíbles. Gracias a esta experiencia he entrado en contacto con los que para mí eran los DDTeam: Xavi Bastida, Arturo Balseiro, Pau Loewe, Jose Manuel Meneses, Merche Arque, también conozco a otros que desconocía hasta el momento y que también estaban en el taller como Pablo Perona, Nelly Guimaras, Aleix Torrecillas, Arjen Tuiten.
U: ¿En algún momento estuvisteis en contacto con Guillermo del Toro o alguno de los miembros del reparto del film? ¿Qué tal con Guillermo del Toro?
AH: Pues yo personalmente no he conocido a muchos. Tuve la suerte de coincidir en varias ocasiones con personas como Doug Jones, un tipo superdivertido, Everet Burrell, de Cafe FX, y un pelín con Guillermo del Toro. Veamos, realmente en el rodaje yo sólo he estado dos semanas. Tengo una anécdota graciosa, estábamos en el rodaje de una escena con Álex Angulo y Gonzalo Uriarte, y resulta que Guillermo Navarro quería comprobar algo de la fotografía y nos pidieron que nos apartáramos… "los chicos de DDT que salgan de plano" y va Del Toro y dice "ese que tiene arriba los calzones, que se los baje un poco que se lo estamos viendo todo"… resulta que al agacharme se me había bajado el pantalón y se me estaban viendo los calzoncillos!
U: He leído por ahí que tu participación en el film fue desarrollando el sapo protagonista de la primera de las pruebas de Ofelia. ¿Qué puedes contar del desarrollo de este efecto especial?
AH: Veamos, aquí hay que comentar que, primero casi todos los diseños de DDT parten de un chico llamado Sergio Sandoval que es un ilustrador con un talento increíble que trabaja en DDT. Luego, a partir del dibujo de Sandoval, Montse Ribé modela una maqueta hiperdetallada y de ella se hace a escala el sapo… un efecto de un metro y pico de tamaño. Finalmente, entre un grupo de gente, Merche Arque, Lorenzo Tamburini, Aleix Torrecillas, yo, etc. modelamos las patas por separado, el cuerpo, la cabeza y de ahí sacamos moldes y sus sucesivas copias.
U: Bueno, ahora el presente. Actualmente te encuentras trabajando para el canal de televisión La Sexta y en el programa de Anónimos. Recuerdo que cuando te conocí me comentabas que te gustaban mucho los efectos caracterización, envejecimiento y demás ¿Podemos considerar que esta fase profesional actual completa tu deseo inicial?
AH: Bueno, antes de profundizar indicar que actualmente estoy en Madrid trabajando en Plan 9, una empresa genial de unos chicos llamados Nacho Díaz y Óscar del Monte que promete mucho para el futuro. Son muy buena gente. Contactaron conmigo a partir de mí trabajo en DDT y gracias a David Martí. Primero era para un par de meses en el verano pensando realizar efectos de caracterización y la cosa se ha prolongado durante 8 meses más, me pasa el tiempo volando! Estamos realizando maquillajes protésicos completos donde no se deja nada al descubierto, un proyecto genial pero con un producción un poco precipitada, donde hemos tenido que desarrollar más de 25 maquillajes en silicona Plat-sil trabajando a un ritmo endiablado pero genial… ahí es donde realmente aprendes muchísimo, modelado, aplicando, trabajo con nuevos materiales. Estoy haciendo de todo y además estamos pillando mucho callo.
U: Para terminar, ¿que esperas del futuro? Vamos, ahora estás en este programa pero, ¿tienes en mente algún otro proyecto?, ¿involucrarte de nuevo en algún otro film?
AH: ¿Qué espero del futuro? Ser feliz… jeje, no que va. Estoy muy contento en Plan 9 FX , son fabulosos y muy atentos con su equipo y, la verdad, es que se hacen querer mucho y les tengo mucho aprecio. He conocido a gente como Cesar The Cat, David Hernández, Cristina Milallo, Miriam Carrasco, Cristina Rodríguez y Gema Peña que son unos cracks! El trato es genial y muy familiar. Ahora estamos embarcados en un corto patrocinado por Robert Zemeckis donde desarrollamos un perro zombi genial. He participado en Los cronocrímenes (2007) de Nacho Vigalondo haciendo maquillajes para Karra Elejalde y una réplica de una de las actrices. Lo único que me mata quizás sea la morriña que tengo de todo esto, no es igual Madrid o Barcelona que Santiago de Compostela y echo de menos estar aquí, disfrutando de la tierra, la calidad de vida que hay… pero bueno, hay que darse cuenta que este trabajo exige estos sacrificios.
Pues nada, hasta aquí la completísima entrevista con Alberto Hortas. Después de la charla nos encontramos con Ricardo Spencer, compartimos unos cafés, un bocata, mucha tertulia y, para terminar, nos fuimos a ver de nuevo El laberinto del fauno a frikear un poco!